El algodón egipcio tiene la reputación de ser uno de los mejores del mundo, un material que a menudo se asocia con las telas de mayor calidad.
De hecho, durante los últimos tres siglos el famoso hilo egipcio ha sido una de las principales ventajas de Egipto en términos de competencia.
Si bien aún hay quien no conoce cuales son exactamente sus virtudes, como se fabrica o incluso qué usos tiene habitualmente.
Aquí daremos respuesta respuesta a estas y otras muchas preguntas, desvelando así los secretos del preciado algodón egipcio.
El algodón egipcio y su origen
La historia del algodón egipcio está profundamente ligada con la del propio Egipto, dado el papel que ha tenido en el desarrollo de su economía.
Su origen se remonta al siglo XIX, cuando el francés Monsieur Jumel encontró en el jardín de su casa de El Cairo algunas plantas de algodón.
Jumel pronto se percató de las excelentes condiciones que ofrecía Egipto para cultivar la planta y comenzó a experimentar para crear un algodón egipcio de calidad superior.
Así fue como dio con la famosa variedad egipcia de fibras extralargas que desbancó al lino, hilo egipcio por excelencia desde la época de los faraones.
Poco después, Mehmet Alí, gobernante de Egipto en aquella época, vio la oportunidad para exportar un producto de alta demanda y favorecer la agricultura en su pais.
De este modo el algodón egipcio floreció y se convirtió en uno de los principales motores económicos de Egipto.
¿Qué es el algodón egipcio?
El algodón egipcio es un tipo de algodón de fibras finas y extralargas que se cultiva en Egipto, gracias a las especiales condiciones climáticas del país.
En su estado más puro esta variedad de algodón permite crear tejidos de muy alta calidad, los cuales ofrecen un tacto especialmente suave y una resistencia superior.
Durante muchos años, el algodón egipcio ha ganado gran popularidad como uno de los mejores del mundo, sin embargo, no todo el algodón que se produce en Egipto es igual.
Técnicamente cualquier algodón producido en Egipto se puede etiquetar como egipcio y esto da pie a que algodones de menor calidad aprovechen la fama del autentico hilo egipcio.
Algunos fabricantes lo mezclan con otras variedades más económicas y lo etiquetan como egipcio cando tal vez solo contiene el 1% del total.
Otros en cambio dividen las fibras para producir más tejido con el mismo algodón, lo que en realidad disminuye mucho su calidad.
Por ello es muy importante tener en cuenta las características de cada algodón, y no solo su procedencia.
¿Cómo se obtiene?
El algodón egipcio se fabrica a partir de la Gossypium barbadense, una variedad de algodón que crece junto al río Nilo en Egipto.
Este suelo tiene una composición química que lo hace muy especial, siendo muy adecuada para el cultivo del popular hilo egipcio.
Ademas se recolecta a mano, lo que garantiza un mayor nivel de pureza. Mientras que la recolecta mecánica es más agresiva, la manual no presiona las fibras, lo cual las mantiene intactas.
Gracias a estas condiciones óptimas es posible producir fibras más largas y finas que dan lugar a un algodón de mayor calidad.
Dado que las fibras son más finas, el algodón egipcio tiene un número más elevado de hilos por pulgada cuadrada, lo que da lugar a telas más gruesas y duraderas.
¿Qué es el conteo de hilos?
En pocas palabras, el recuento o conteo de hilos es número hilos que van hacia abajo y a través dentro de una pulgada cuadrada de algodón egipcio.
Por lo tanto, para 200 líneas, hay 200 hilos superpuestos en una pulgada cuadrada. Cuanto mayor sea el número, más hilos por pulgada cuadrada y más densa será la tela.
La ropa de cama hecha con 200 hilos se siente lujosa y suave, lo que facilita su limpieza y cuidado. Esto se debe a que se trata de una tela de gran flexibilidad.
Sin embargo, por otro lado, la ropa de cama con 1000 hilos puede garantizar la calidad durante muchos años, pero es una tela más gruesa.
La calidad del algodón egipcio frente a otros hilos
A lo largo del tiempo se ha creído erróneamente que cuanto mayor fuera el número de hilos en el algodón mejor sería la calidad de las sábanas, independientemente de su origen.
Sin embargo, en los últimos años, los expertos en telas han descubierto que la procedencia del algodón tiene implicaciones sorprendentes en la calidad, durabilidad y longevidad del hilo, siendo el algodón egipcio uno de los mejor considerados.
El hilo egipcio es más resistente e ininterrumpido lo que le da elasticidad a la tela. Esto significa que las sábanas de algodón 100% egipcio se sienten súper suaves y más duraderas que el algodón común.
Además a diferencia de otros paños de algodón, no forma pelotillas incluso después de múltiples lavados. Nuevamente, esto se debe a las cualidades únicas de la planta de algodón egipcio, porque no produce mucha pelusa.
Beneficios del hilo egipcio de algodón
En resumen el hilo egipcio de algodón es de los mejores del mundo debido a las siguientes características, las cuales lo distinguen de otras fibras naturales:
- Fibras más largas: a longitud de la fibra permite que el hilo se haga más delgado sin sacrificar la resistencia del hilo.
- Mejor absorción: esta variedad de algodón tiene la capacidad de absorber mejor los líquidos, lo cal hace que las telas retengan mejor los colores y sean más duraderas.
- Fibras de mayor calidad: la fuerza de la fibra hace que el tejido sea más fuerte y más resistente a la presión.
- Cosechado a mano: es cosechado a mano, lo que deja las fibras intactas y les confiere una mayor pureza.
Todos estos factores hacen que esta variedad de algodón sea considerada como una de las mejores del mundo. Las telas hechas con el codiciado hilo egipcio son elegantes y suaves, así como también más duraderas.
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